¿Que hay en tu closet?
La Primavera, tiempo perfecto para volver a usar ese vestido amarillo , pero… ¡oh! ¿ donde está? Nuestro armario probablemente esté activado para tener a la mano algunas prendas de invierno por la pasada temporada y ocupe gran parte de nuestro armario con abultados abrigos que impiden el alcance rápido de otras prendas y ayudando a la practicidad de elegir ¨algo que ponernos¨
Bueno, quizás éste sea el momento de actualizar nuestro armario y la primavera es la estación en la que todo cambia y se renueva, ordenar y simplificar nuestras cosas para que la energía fluya mejor en el hogar”. Hacer una buena limpieza es la base para lograr una casa sana a nivel energético, según la milenaria disciplina oriental del Feng Shui, que ahora tanto se utiliza en el diseño de interiores en todo el mundo.
Pero además, si te concentras en el orden de tu armario, ganarás mucho tiempo por las mañanas teniendo todas tus prendas ordenadas y a mano, y visualizando bien todo lo que tienes a tu disposición para estar espléndida.
• Planifica
Debes redactar una lista en la que fijes tus objetivos con esta limpieza. ¿Cuantos días vas a tardar? ¿Cuánto quieres lograr? Agéndalo y sigue tu plan. Si vas a limpiar toda tu casa y no sólo tu clóset, quizás es mejor empezar por los ambientes más caóticos y desordenados; (por ejemplo, si tu garaje tiene una acumulación de trastos de años, comienza por ahí, lo mismo si tienes un cuarto asignado a las cosas en desuso).
• Manos a la obra
Para comenzar la tarea, si te es posible, saca absolutamente toda la ropa afuera del closet, y apóyala sobre la cama o el suelo. Ese desorden total, te obligará a terminar lo que empezaste de manera cabal, y no podrás dejarlo a medio hacer.
Aprovecha que sacaste la ropa para pasar la aspiradora dentro del closet, limpiar los cajones, colocar antipolillas, y luego perfumar con alguna fragancia de ambiente que te agrade. Esto es algo que ya no harás por mucho tiempo cuando tus prendas estén colgada allí, así que aprovecha para dejarlo impecable.
• Primera selección
Guardas esos jeans durante años, por si algún día adelgazas de golpe, y te lo vuelves a poner… Y ese sweater que no combina con nada… por las dudas.
Hay una regla muy importante; las prendas que no hayas usado durante el último año, o que ya estén pasadas de moda y sabes perfectamente que nunca más te las vas a poner, la debes retirar de tu armario, (a menos que sea ropa especial de fiesta). Y si tienes dudas con alguna prenda, métela en el ‘cajón de la duda’. Si en el próximo año no la usas, en la próxima limpieza ya la puedes retirar”. Es un truco que funciona y siempre puedes tener el armario al día, y tenerlo un poco vacío para incorporar nuevas prendas que te vayas comprando.
• Usa el método de los 4 pasos
Una vez que tengas en claro que ropa ya no usarás, el siguiente paso es dividir toda tu ropa usando estos criterios:
a) la que vas a guardar
b) la que quieres arreglar
c) la que vas a regalar
d) la que no se puede ni arreglar y debes botar.
Regalar es algo especialmente importante a nivel energético. Alguien puede necesitar esa ropa que no usas… te hará bien donarla, a tu energía y a tu alma.
• Optimiza el espacio
Si no tienes suficiente espacio de guardado, trata de agregar estantes u organizadores que te permitan un mejor manejo espacial.
Los organizadores de cinturones, bufandas y pañuelos, son una buena opción para despejar esos accesorios que ocupan mucho espacio, y a veces no te dejan ver lo que hay detrás.
Los organizadores de zapatos, de plástico o de tela, realmente marcan la diferencia en cuanto a un espacio ordenado.
• Arma tu propio sistema
Uno de los felices resultados de la limpieza del clóset, es que te reencontrarás con prendas que adoras, y que probablemente, te hayas olvidado de su existencia.
Ahora, debes elegir un buen criterio para organizar las prendas que tienes. Puedes el orden de las tiendas, puedes poner primero las prendas sin mangas, detrás las de mangas cortas, y por último, las de mangas largas.
Pero también puedes separarla en prendas para ir a la oficina, y ropa para salir.
Recuerda que los abrigos, especialmente los de cuero, deben guardarse tapados con una sábana vieja para protegerlos del polvo.